Algunos propietarios se desesperan por llevar ya mucho tiempo tratando de vender su vivienda sin conseguir éxito alguno.
Para estos casos os vamos a comentar cuales son los principales errores que se suelen cometer y por los cuales no se culmina la venta de un inmueble.
1) Precios demasiado altos para el mercado
A todos nos gustaría poder vender nuestra vivienda, la cual para nosotros es un bien muy preciado, a un precio muy alto, pero esto en ocasiones no se adapta a la realidad.
Y es que muchos propietarios quieren vender rápido sus inmuebles, pero les fijan precios que están muy altos en comparación con otras viviendas de las mismas características, lo cual no les permite darlos salida en el mercado.
2) Falta de costumbre o tiempo para las negociaciones
A la hora de vender una vivienda se necesita negociar con una serie de personas y defender tus intereses ante las diferentes posiciones. Habrá que entablar contacto con: el comprador, el agente del comprador, el abogado del comprador, la empresa de certificación de venta, el banco del propietario (en ocasiones) e incluso con los falsos compradores.
También habrá que enseñar la casa todas las ocasiones que sea necesario y atender a los interesados cordialmente adaptándose a sus horarios.
Es fundamental la preparación para hacer frente a todas las negociaciones.
3) Falta de capacidad para llegar a los posibles compradores
Los particulares no tienden a investigar compradores potenciales y, por lo tanto, desconocen su capacidad económica, necesidades de vivienda, etc. Es necesario además, en función de las características de la vivienda saber cual será la mejor vía para llegar al público adecuado.
Por otro lado, en ocasiones el propietario no sabe responder ciertas preguntas que se le pueden plantear para cuestiones más técnicas del proceso de venta.
4) Carencia de conocimientos legales
En muchas ocasiones una venta se puede paralizar y no llevarse a cabo cuando el contrato planteado por el propietario no les aporta ninguna confianza a los compradores por falta de algunas cláusulas necesarias.
Hay muchas cláusulas que se deben tener en cuenta en un contrato de compraventa, además de cuestiones hipotecarias, posibles herencias, plusvalías y otros impuestos.
5) Desconocer como sacar el máximo partido a la vivienda
En el caso del sector inmobiliario como en las ventas de cualquier otro producto, es fundamental preparar la vivienda de la manera más atractiva posible para que entre mejor por los ojos al posible comprador.
Para ello se deben tener en cuenta distintos factores, los más importantes la limpieza y la decoración, por eso es una herramienta muy útil contar con expertos que te asesoren para sacar el máximo partido a tu casa.
Hay que añadir que siempre será mejor que la vivienda a vender no presente ningún inquilino.
6) No disponer de tiempo suficiente
Se debe emplear todo el tiempo necesario en el proceso de búsqueda de clientes, así como en el desarrollo de la venta y muchas veces los propietarios tienen vidas ajetreadas y no son capaces de sacar el tiempo suficiente para poder hacerlo correctamente.
7) No saber cómo difundir el anuncio del inmueble ni aprovechar las herramientas de marketing o las nuevas tecnologías.
Limitarse a hacer fotografías con el móvil y publicarlas en portales gratuitos o en las redes sociales no es suficiente. La mayoría de las imágenes tomadas de esta forma tienen una calidad cuestionable y un mal procedimiento puede afectar a la venta.
Al realizar fotografías, hay que prestar atención aspectos como la iluminación, el ángulo, el encuadre… ¡Una imagen vale más que mil palabras! Y el uso de las redes sociales y los portales conlleva tener, al menos, los conocimientos a nivel usuario y unas nociones mínimas de redacción y descripción enfocadas a la venta.
8) No saber cómo cerrar la operación de compraventa.
Muchos propietarios desconocen que antes de cerrar la compraventa hay que tener en cuenta: que la supervisión técnica de la vivienda haya sido satisfactoria, que el contrato debe ser aprobado por la parte compradora, que se debe comprobar que el comprador tenga solvencia y que debe hacerse el cálculo del coste de los impuestos y de notaría.
¿POR QUÉ SE DEBE ENTONCES INVERTIR EN PROFESIONALES?
Como se puede observar, para que un particular pueda hacer frente a un proceso de compraventa necesita dedicarle tiempo, esfuerzo y contar con una serie de conocimientos.
Tener el apoyo y el asesoramiento de profesionales puede ser muy eficaz, aunque se tenga que invertir en ello.
-Los agentes inmobiliarios suelen tener los datos necesarios sobre las viviendas que comercializan: analizan la zona, comparan precios, conocen el mercado, etc.
-Las inmobiliarias y los agentes están cualificados para captar compradores y ofrecerles la seguridad que buscan.
-Las empresas dedicadas al Homestaging preparan la vivienda de manera profesional para su venta, presentándola como un producto atractivo, mediante sus servicios de decoración e interiorismo.
-Los servicios de fotografía y vídeo realizados por profesionales darán excelentes resultados, ya que se obtendrán imágenes de calidad.
-El agente inmobiliario conoce técnicas de marketing y dominan las herramientas especializadas para la difusión, así como las redes sociales, la mejor manera de publicar en los portales, etc.
En definitiva, un particular puede optar por vender su vivienda, pero encontrando a los profesionales adecuados tendrá un buen asesoramiento que después se reflejará de manera positiva en los resultados.